Investigadores de la Universidad de Cornell analizaron la historia evolutiva para comprender cómo actuó una enzima clave (Rubisco) para la fotosíntesis cuando los niveles de CO2 eran mucho más altos. Replicarla en cultivos modernos mediante edición genética podría ayudar a adaptarlos para un futuro más cálido y seco y producir plantas con mayor biomasa o rendimiento.
Cultivos transgénicos podrían evitar la emisión de 33 millones de toneladas de CO2 en Europa
El uso de cultivos genéticamente modificados (GM o transgénicos) en la agricultura sigue siendo polémico, especialmente en Europa, tanto por un desconocimiento y oposición política. Sin embargo, un nuevo estudio muestra que los cultivos genéticamente modificados en realidad pueden ser buenos para el medio ambiente y para el clima en particular. Los resultados sugieren que la adopción de cultivos transgénicos en la Unión Europea (UE) podría reducir considerablemente las emisiones de gases de efecto invernadero, una lectura incómoda para los grupos ecologistas que durante mucho tiempo han combinado la defensa del medo ambiente con una firme oposición a los transgénicos.
Energía solar y plantas: Nuevo estudio aclara un mecanismo clave de la fotosíntesis C4
Algunas plantas dominan una forma especial de utilización de la energía solar que ofrece grandes ventajas en condiciones cálidas. Un nuevo estudio proporciona ahora nuevos conocimientos sobre una proteína que desempeña un papel central en la llamada fotosíntesis C4. El trabajo, dirigido por la Universidad de Bonn, también involucró a investigadores de Argentina, Canadá y la Universidad de Düsseldorf, y ha sido publicado en la revista The Plant Cell.
Con edición genética mejoran rendimiento de cultivos imitando mecanismos moleculares de las cianobacterias
Un nuevo estudio describe un paso significativo hacia la mejora de la fotosíntesis y el aumento de los rendimientos, lo cual se logró al silenciar genes con CRISPR para imitar mecanismos de las cianobacterias en cultivos agrícolas.
Forraje genéticamente modificado que reduce emisión de metano en ganado y porotos más nutritivos
Un investigador de la Universidad del Norte de Texas ha dado un paso clave en comprender como producir taninos condensados en cultivos forrajeros como la alfalfa, lo cual permitiría aumentar sus niveles con el fin de reducir la emisión de metano (gas de efecto invernadero) en el ganado. Además, podrían reducirse los taninos en cultivos como las legumbres, donde interfieren con la absorción de nutrientes como el hierro.
Joanne Chory, la científica que desarrolla «super plantas» para salvar al mundo del cambio climático
La Dra. Joanne Chory espera que las modificaciones genéticas para potenciar las capacidades de fijación de CO2 de las plantas puedan jugar un papel clave en la lucha contra el cambio climático, pero sabe que el tiempo es corto tanto para ella como para el planeta.
Cambio Climático: Plantas modificadas genéticamente para absorber más CO2 de la atmosféra
Científicos del Salk Institute en California están trabajando en modificar genéticamente algunas plantas para potenciar sus capacidades naturales de fijación de carbono y así puedan jugar un papel clave en la lucha contra el cambio climático.
Europa sin transgénicos ha emitido un extra de 33 millones de toneladas de CO2 al ambiente
El nuevo análisis del enorme costo ambiental europeo al no permitir el uso de transgénicos a sus agricultores, será una lectura incómoda para los grupos ambientalistas que durante mucho tiempo han combinado la defensa de la mitigación climática con una firme oposición a los transgénicos.
Planta transgénica que se comporta como suculenta: uso eficiente de agua y tolerante a salinidad
Después de varios años de experimentación, los científicos han modificado al berro (Arabidopsis thaliana), para comportarse como una planta suculenta, mejorando la eficiencia del uso del agua, la tolerancia a la salinidad y reduciendo los efectos de la sequía. El método de modificación de suculencia de tejidos ideado para esta pequeña planta con flores, se puede utilizar en otras plantas para mejorar la tolerancia a la sequía y la salinidad con el objetivo de trasladar este enfoque a cultivos alimentarios y bioenergéticos.
Desarrollan cloroplastos artificiales que convierten la luz solar y CO2 en compuestos orgánicos
Durante cientos de millones de años, las plantas han tenido la capacidad de aprovechar el dióxido de carbono del aire utilizando energía solar, y ahora, investigadores están en camino de construir células artificiales como biorreactores verdes sostenibles. Un equipo de investigación ha logrado desarrollar una plataforma para la construcción automatizada de módulos de fotosíntesis del tamaño de una célula. Los cloroplastos artificiales son capaces de unir y convertir el dióxido de carbono (gas de efecto invernadero) utilizando energía luminosa.